La psicomagia es una práctica sanadora que actúa a través del símbolo, la metáfora y la belleza, esencialmente con el lenguaje de los sueños. Al dejar de considerar a la dimensión inconsciente como un enemigo y perder el miedo a verse a uno mis- mo, uno puede descubrir los traumas que provocan sufrimiento. Sin embargo aunque uno sepa lo que le sucede y el porqué, no es del todo libre del dolor. La psicomagia no pretende - como el psicoanálisis - curar a través de la palabra convirtiendo los mensajes que envía la dimensión inconsciente en un discurso racional, sino enseñarle al racional a manejar el lenguaje inconsciente.

Los procesos de nuestro cerebro son más simbólicos y analógicos que lógicos. Para éste, una fotografía no sólo representa a la persona retratada, sino que es ella misma. Considera a una parte como el todo, proyecta las personas que pueblan su memoria sobre seres reales o cosas. En la psicomagia se le proponen al consultante acciones concretas, efectuar un acto simbólico que, de alguna manera, restaurará su memoria y le permitirá realizar lo irrealizable.

No obstante, para lograr que el acto dé un óptimo resultado, el consultante antes debe liberarse de la moral impuesta por su familia, su sociedad y su cultura. Si lo hace podrá por ejemplo, sin temor, pegar una fotografía de su padre sobre dos sandías y las podrá hacer estallar a batazos. Su dimensión inconsciente dará por realizado el asesinato y la castración. El consultante se sentirá así más libre.

Aquello que nos atemoriza pierde fuerza en el momento en que dejamos de combatirlo o de alejarlo de la mente para integrarlo a través de un acto psicomágico que nos ayude a despertar y hacer de la vida un sueño lúcido lleno de conciencia. No basta con comprender el porqué de un conflicto. Hay que actuarlo, darle una salida al impulso, al comportamiento repetitivo que nos dificulta la existencia. Así fue como se creó la psicomagia, el psicochamanismo y, más adelante, el psicorritual.
Durante los últimos veinte años y hasta el día de hoy, Cristóbal ha realizado cientos de actos psi- comágicos sobre él mismo, experimentando hasta qué punto con esa práctica era posible liberarse de tantos traumas e impulsos aparentemente incontrolables, hasta reestructurar la memoria.

Psicomagia